Los proyectos de energías renovables cada vez están cobrando más fuerza. La transición energética es una necesidad y las políticas están orientadas a que sea una realidad. El impulso de la sostenibilidad tiene que verse fortalecido por la inversión privada y por ello se promueven este tipo de iniciativas.
A pesar de que las inversiones en renovables todavía presentan sus riesgos (como todo tipo de inversiones), actualmente supone una alternativa más segura que otros tipos de propuestas. Si sigues leyendo, descubrirás dónde reside el atractivo de estos proyectos y cómo invertir de forma segura en los mismos.
¿Por qué los proyectos de energías renovables se encuentran al alza?
Entre otras cuestiones, la Unión Europea ha adquirido el compromiso de descarbonización de cara al año 2050. Existen fondos y políticas cuya finalidad es cumplir con este objetivo (por ejemplo, los fondos Next Generation).
Este podría decirse que es el principal motor por el cual los proyectos en energías renovables presentan un crecimiento exponencial en nuestra región. Sin embargo, más allá de las cuestiones puramente medioambientales y éticas, se ha demostrado que este tipo de iniciativas tienen potencial para ofrecer una buena rentabilidad financiera.
Se espera un aumento de la demanda de energía eléctrica y es necesario satisfacerla con fuentes alternativas. La tecnología avanza en este campo. Actualmente, los parques solares de paneles fotovoltaicos pueden garantizar un suministro constante (los gestores pueden realizar un seguimiento y optimización de las instalaciones en tiempo real) y con menores costes.
En este sentido, la energía fotovoltaica y eólica presentan un mayor grado de desarrollo frente a otro tipo de energías. Son competitivas y por ello se encuentran en el momento idóneo para potenciarlas mediante capital privado.
Por ejemplo, el hidrógeno verde todavía necesita fondos públicos que le permitan evolucionar como fuente energética sostenible. Se encuentra en una fase distinta. (necesita llegar a ser competitivo).
¿Existen proyectos de energías renovables de gran envergadura?
Por supuesto, existen grandes proyectos a nivel mundial relacionados con la transición energética y el abandono de los combustibles fósiles (relacionados con la energía geotérmica, biomasa, mareomotriz, solar, eólica e hidroeléctrica).
Podríamos nombrar la Central Solar Fotovoltaica Mula (Murcia), Andasol Guadix (Granada) o la Planta Fotovoltaica Don Rodrigo (Sevilla) como proyectos de energías renovables llevados a cabo en España. De hecho, nuestro país tiene algunas de las mayores plantas de energía solar que existen (la planta Nuñez de Balboa, situada en Badajoz y construida por Iberdrola, es la mayor de Europa).
No es de extrañar que, una vez derogado el impuesto al sol, un país con una gran riqueza solar albergue este tipo de instalaciones. De hecho, hay quién considera que son pocas y son necesarias más iniciativas. España también cuenta con buenos recursos eólicos.
También existen proyectos con otro tipo de tamaños al alcance de cualquier tipo de inversor. No es necesario destinar grandes sumas de capital gracias a soluciones financieras como el crowdfunding.
Los huertos solares son espacios de menor tamaño que un parque solar propiamente dicho, pero su función es la misma (vierten su producción a la red eléctrica). También puedes encontrar instalaciones de vuelo (en tejados, terrazas, etc.) para el autoconsumo y venta del excedente.
¿Hay riesgo al invertir en proyectos de energías renovables?
Dados los avances tecnológicos, el apoyo gubernamental, los menores costes de producción y el hecho de que se trata de fuentes inagotables, podríamos afirmar que las energías renovables tienen un menor riesgo que otro tipo de proyectos.
Desde las Naciones Unidas advierten del daño que causan los efectos del cambio climático y se aúnan esfuerzos para que las iniciativas puedan salir adelante.
El sector ofrece rentabilidades atractivas y potencial crecimiento, además sirve como elemento diversificador para las carteras de inversión. Podría decirse que es una cuestión estratégica (a largo plazo), pero a día de hoy se encuentra en plena expansión y también tiene capacidad de brindar beneficios en el corto y medio plazo.
No obstante, se deben tener presentes los riesgos inherentes a toda inversión. Quizá el más significativo sea el que se trata de un sector complejo y técnico.
Si un inversor compra unas placas fotovoltaicas, podrá obtener rentabilidad directamente e incluso tomar las decisiones oportunas. Sin embargo, también tiene que conocer los aspectos relativos a la gestión y solventar los problemas técnicos.
La inversión directa en energías renovables, además de una mayor suma de capital, requiere de conocimientos en múltiples materias (técnicos, legales, financieros, etc.).
A través de una plataforma de crowdfunding especializada en el sector de las energías renovables, como Flobers, se eliminan estos riesgos:
- Democratizan el sector, ofreciendo acceso a inversores minoristas (particulares y pymes).
- El inversor cuenta con un equipo multidisciplinar compuesto por profesionales con experiencia en el sector.
- Los proyectos de energías renovables pasan por una valoración antes de ser publicados.
- Generan una comunidad compuesta por inversores.
- Crean un mercado interno (donde el inversor puede vender posteriormente sus participaciones).
- Hacen posible invertir en múltiples proyectos de energías renovables para una mejor diversificación.
- Permiten un seguimiento completo y transparente del porfolio de inversión.